lunes, 10 de mayo de 2010

REFLEXION PARA EL DIA DEL MAESTRO

Diócesis de La Dorada Guaduas
Mayo 15 Día del Maestro.

El Maestro,
sujeto determinante en la formación
de los estudiantes.


1. Introducción.
La Celebración anual del DÍA DEL MAESTRO, es una oportunidad invaluable para reconocer, mediante una reflexión sería y crítica, el “papel del maestro como sujeto determinante en la formación de los estudiantes”.

La escuela, (aquí se entiende toda experiencia educativa), requiere de un maestro que realice la síntesis fe-cultura-vida-conciencia ecológica en su propia persona, siendo fundamental el testimonio de vida que se expresará a través de una calidad humana, profesional, académica y de una visión cristiana del mundo, de la vida y de la persona. Estos factores determinarán la capacidad positiva de incidencia en la formación de las conciencias de quienes se educan.

Pensar en el tipo de maestro que requieren las instituciones educativas hoy, implica de parte nuestra la proposición de un perfil del maestro acorde a la época, a las necesidades de los estudiantes, a los requerimientos técnicos y científicos y, de manera especial, a la crisis de valores que enfrenta el hombre contemporáneo, de tal manera que uno de los aspectos fundamentales abordados desde la gestión educativa y la vivencia de la enseñanza, sea la presencia real de los valores en el ideario educativo y en las diferentes actividades escolares, incluso en aquellas que se consideran mínimas o sencillas y servirán de reflejo de quienes tienen la responsabilidad de enseñar: Los Maestros.

Desde la Vicaría de Pastoral de la Diócesis de La Dorada Guaduas, en la Celebración del Día del Maestro 2010, proponemos a los educadores de nuestra región un “perfil del maestro” que contribuirá notablemente a su crecimiento humano y al fortalecimiento de los valores humanos y cristianos y a las convicciones de los estudiantes.

Además presentamos la Persona de Jesús como prototipo de Maestro y Autoridad, según lo refieren los Evangelios cuando dicen de Él: “Les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como sus doctores” (Mateo 7,28).

2. Perfiles.

2.1. Académico.
Refiere a los conocimientos que el maestro debe reunir acerca del área de su competencia, demostrable en los amplios conocimientos acerca de la materia que enseña en el orden cultural, social, político, religioso y ecológico. El conocimiento del maestro deseoso de formar personas capaces de construir la paz, deberá tener como eje transversal una fuerte y significativa experiencia espiritual y un alto sentido de lo humano y lo ético.

2.2. Pedagógico-didáctico.
Este factor se identifica mediante los siguientes indicadores: Que explique con claridad y si alguien necesita más ayuda que busque la forma de explicarle más sencillamente; que dé lugar a que le pregunten en clase; que explique y amplíe con ejemplos lo enseñado; que sepa observar; que no intimide a los estudiantes, sino que los incite a preguntar sus dudas, a comunicar sus experiencias, a buscar ayuda ante las situaciones problemáticas; que sea creativo al momento de dar un tema y/o un trabajo; que le agrade el aprender cosas nuevas; que las clases sean dinámicas; que sepa cómo enseñar su materia proponiendo actividades distintas e interesantes, haciendo uso de la lúdica y la creatividad; que sea justo al calificar y fundamente por qué calificó con determinada nota; que relacione su materia con temas de otras asignaturas; que aplique los recursos tecnológicos; que asesore cómo estudiar mejor; que de prioridad a la observación, capacidad que le debe permitir ver a cada estudiante como persona singular, con valores que le son propios, sin rotularlo ni etiquetarlo, percibiendo la realidad que ve el estudiante y siendo consciente de sus auténticos sentimientos y actitudes. El maestro que sabe observar tiene una primera y principal fuente de aprendizaje en sus mismos estudiantes quienes a través de su conducta ofrecen muchas enseñanzas.

2.3. Cualidades personales.
El maestro está llamado a ser comprensivo y confiable, pero sin dejar su rol de guía; amante del diálogo con los estudiantes; que no demuestre favoritismo por nadie; que sea muy paciente y tolerante, abierto a las opiniones y posturas de los demás; que no realice comparaciones con otros estudiantes; que sea una persona a la que el estudiante quisiera parecerse “cuando sea grande”; que sea auténtico; que ayude a los estudiantes a reconocer sus propias capacidades y dificultades y los oriente en su futuro; que escuche a los estudiantes y procure dar una palabra que los oriente en la resolución de los problemas; que al equivocarse, sepa disculparse; que no rotule o etiquete al estudiante; que sea comprensivo; que sea puntual llegando e iniciando las clases; que no falte nunca o falte muy poco a la Institución; que respete y haga respetar entre los estudiantes su trabajo y el de toda la comunidad educativa; que sus clases estén bien preparadas.

2.4. Autoridad.
Un maestro capaz de conducir al grupo de estudiantes mediante el reconocimiento de su autoridad, que sea respetado; que no abuse de la autoridad; que vivencie la autoridad como servicio para el desarrollo de las potencialidades del otro.

2.5. Compromiso socio-comunitario.
Un maestro que participe de actividades de servicio a los necesitados; que tenga buena relación con sus compañeros y autoridades; que se comunique con los padres para informarle sobre la marcha del aprendizaje, dificultades y aciertos, como también los hechos sobresalientes de sus hijos; que sienta la necesidad de formar parte de equipos de trabajo interdisciplinarios con fines sociales; un sentido crítico de la política, libre de cualquier ideología.

2.6. Religiosidad.
Un maestro que se preocupe por la formación religiosa y su experiencia de Dios y la de los estudiantes; que en el vínculo con los estudiantes se advierta su relación con Dios; que conozca y de testimonio de su fe dando a conocer a Cristo a través de su palabra y ejemplo de vida; que esté presente junto con los estudiantes en la celebración de los Sacramentos, especialmente en la celebración eucarística, momentos de oración en el colegio, convivencias, etc.; que ayude a los estudiantes a iluminar la realidad humana y a relacionar (integrar) su materia con el evangelio; que ayude a discernir evangélicamente.

3. Jesús educa con autoridad porque es auténtico y es la verdad.

Después de haber desarrollado “un perfil” para el maestro, es interesante identificar en la persona de Jesús la ejecución de todos estos valores que hicieron de Él el Maestro por antonomasia y nos permite contemplar con certeza la posibilidad de actuar según el modelo Cristo.
Nuestro modo de imitar al Modelo no es algo exterior, sino que se trata de conformarse a Él, como “meterse en su piel”, “sumergirse en Él”, pues “conformar” es “hacerse a la forma”, participar de su vida, de sus sentimientos. Es decir, estar motivado, en la medida posible a una criatura, a revivir la vida de Jesús y prolongarla en la propia, porque la gracia que Él nos ganó es participación de la que inhabita en su alma: “Tened en vosotros los mismos sentimientos que tuvo Cristo Jesús” (Filipenses 2, 5).

La sana pedagogía de Jesús encontró en los siguientes aspectos una muestra clara y real de su dimensión veraz y pedagógica

3.1. Enseñaba con autoridad.
Ellos, dice la Palabra, “estaban poseídos de admiración por Su enseñanza, porque Su palabra estaba llena de autoridad” (Marcos 1,21-28); Jesús suele decir “yo os digo”, habla en nombre propio como nadie había hecho, e imparte una enseñanza divina: “Habéis oído que se ha dicho: No cometerás adulterio. Mas Yo os digo: Quienquiera mire a una mujer codiciándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón.” (Mateo 5,27-30). Jesús, Su propia palabra es Verdad liberadora del hombre, porque siendo hombre perfecto, manifiesta al hombre su verdadero ser, que es de Dios y para Dios: “YO SOY EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA; nadie va al Padre sino por Mí” (Juan 14,6).

3.2. Su enseñanza es original...
Y, a la vez, una recreación y perfeccionamiento de lo ya existente: “No vayáis a pensar que Yo he venido a abolir la Ley y los Profetas. Yo no he venido para abolir, sino para dar cumplimiento...” (Mateo 5,17-19). Jesús es un maestro que enseña con autoridad una doctrina original; que aduce la revelación del Padre como fuente de Su autoridad; que se ofrece como guía, invitando a que Lo sigan todos, porque es maestro universal, criterio y norma de conducta.

3.3. La figura amable de Jesús nos enseña a vivir de una manera auténtica.
En su vida encontramos la verdad (“yo soy... la verdad”), encontramos un sentido a todo. Jesús es alguien que habla con autoridad, que sabe el por qué de las cosas y para quien tiene un por qué le es muy fácil el cómo. Romano Guardini acaba su obra sobre la realidad humana del Señor con un capítulo sobre “El Maestro, el Poderoso, el Existente”; dice de Jesús: “Es un Maestro santo: vive auténticamente. Tiene la plenitud del conocimiento de Dios: es el que sabe, el sabio: sabe más que nadie, pero sobre todo sabe esencialmente, tanto de los hombres como del mundo. Él ve. Distingue realidad y apariencia, sentido y engaño. Conoce lo bueno y lo malo. Sabe el camino: “quedó admirada la gente de su enseñanza, porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como sus doctores” (Mateo 7, 28-29)”.

3.4. De Él aprendemos a ser auténticos, la honorabilidad intelectual, la honradez y la coherencia de vida.
Significa ser yo mismo. Muchos no son maestros sino mercenarios: enseñan lo que está de moda, dicen lo que queda bien, hoy hay mucho miedo a aparecer como católicos. Hay como un afán de éxito y gloria, decir lo que conviene. Jesús en cambio dice la verdad, sin avasallar; está lleno de respeto ante la libertad del hombre, nunca le hace violencia; no engaña con sugestiones como la publicidad, ni con un entusiasmo superficial, ni por terror (aunque los hombres muchas veces basemos la educación en el miedo), ni por sorpresa, como decía Guardini: “siempre apela a la responsabilidad del que escucha y le lleva al punto donde ha de decir ‘sí’ o ‘no’”. Frente a los que quieren éxito, Jesús nos muestra la búsqueda de la verdad”, enseña lo auténtico, lo que se vive.

Para un maestro cristiano, todo queda referido al modelo Cristo, y ofrecido al Padre Dios, entonces, no hay polilla o polvo, no hay preocupaciones por la precariedad, siguiendo el ejemplo y los consejos de Jesús: “no os preocupéis por vuestra vida...” Entonces la autenticidad adquiere una coherencia que es testimonio fiel, martirio, pues muchos sufren por la verdad.

Si me miro en Cristo, mis perspectivas se amplían sin cesar, van mucho más lejos: ya no tendré objetivos a los que someterme; las metas no me dominarán pues no dependo de que se cumplan: puedo ya celebrar el acontecimiento de que “el Reino de Dios ha llegado” (Marcos 1,5) y se está abriendo camino continuamente, aunque no lo vea. El vivir no se desliga del contemplar, ni del dar la vida, la verdad me lleva a ser verdadero y en la medida que soy verdadero, “soy maestro”.

4. Conclusión.

Sería maravilloso que Cristo Modelo del Maestro nos enseñara a participar de su autoridad y de su autenticidad, pues el que de verdad es maestro lo es en el testimonio que sirve de modelo.

El ejemplo de Jesús nos da la clave para profundizar luego en tantos valores. Concretamente, a enfocar el tema de la autoridad, que todo maestro desea entender y distinguir del poder... el poder que se impone por la fuerza reprime al que está debajo, la autoridad en cambio tiene fuerza en sí misma y provoca seguimiento; es algo que se puede perder o ganar, y se convierte muchas veces en una gran preocupación: ¿Cómo "ganar la autoridad con mis estudiantes"?
Jesús es poderoso: en los milagros, las cosas -para mostrar el reino de Dios- se sujetan a su voluntad. La autoridad se refleja en el pasaje citado del Sermón de la montaña que nos ha acompañado en esta meditación para el DÍA DEL MAESTRO : “Les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como sus doctores” (Mateo 7, 28). Sus palabras a veces eran duras, atrevidas, llenas del impulso de la excitación, además esas palabras tocan el corazón allí donde no alcanza ninguna palabra humana. Apartan el engaño y ponen al hombre delante del Dios santo. Llaman a la conversión de todo, incluso del que es bueno y piadoso ante el mundo, hacia Dios, y dan la posibilidad de realizarla. Sus palabras no sólo son significados, sino fuerzas; fuerzas procedentes de Dios, fuerzas del Espíritu Santo.

También hay poder en sus actitudes, en su acción, en su figura. Nos dicen cómo en Pascua echó del Templo a todos los compradores y vendedores”, con pocas palabras y unos cordeles trenzados le obedece una multitud: resplandece algo en Él. Es un poder que “rige a través de todo. Forma una personalidad tremenda, una honda concentración del alma, de una voluntad perfectamente libre, que está entera en la sagrada misión, una presencia gigantesca… Pero por detrás surge más, desde Dios, tan inmediatamente, que, por ejemplo, después de la pesca milagrosa, estando sentado en la barca, Pedro cae espantado a sus pies y grita: -“Aléjate de mí, que soy un hombre pecador, Señor!” (Lucas 5, 8-9).

La celebración del DÍA DEL MAESTRO en nuestra Diócesis de La Dorada Guaduas, será siempre motivo de alegría y experiencia meditativa de una misión tan grande y noble encomendada a mujeres y hombres que han dicho sí al Señor y hoy en diferentes escuelas, colegios e instituciones construyen la Diócesis de la Paz.

sábado, 8 de mayo de 2010

EUCARISTIA PARA LOS MAESTROS


Guia para la Celebración de la Eucaristía en el Día del Maestro.


Comentario Inicial.
Hermanos, la celebración de la Eucaristía nos permite en esta oportunidad agradecer a Dios Padre por la vida y obra de los Maestros de nuestra comunidad parroquial. El desempeño de cada uno de los maestros es, sin duda, la manifestación del amor de Dios que acompaña a los niños y jóvenes en el desarrollo de sus habilidades. Participemos en la Eucaristía con alegría y gratitud a Dios por enseñarnos las maravillas del mundo a través de nuestros hermanos mayores: Los Maestros.

Oración colecta.
Señor, mira complacido a tus hijos maestros y derrama sobre ellos los dones de tu Espíritu, para que crezcan sin cesar en el amor a la verdad y busquen, en la doctrina y en la práctica, la perfecta santidad de los cristianos. Por nuestro Señor Jesucristo.

Comentario a la Palabra de Dios.
La fidelidad a la Palabra de Dios es la única garantía de nuestra felicidad verdadera y realización cristiana. Acompañar a niños y jóvenes en sus procesos de aprendizaje es permitirles descubrir que la fidelidad a Dios y a su Palabra es la fuente de toda felicidad verdadera y en ese descubrimiento aparece Cristo como camino, verdad y vida. Escuchemos.

Lectura del Libro de Josué. 1,1-9.
Después de la muerte de Moisés, el servidor del Señor, el Señor dijo a Josué, hijo de Nun y ayudante de Moisés: "Mi servidor Moisés ha muerto. Ahora levántate y cruza el Jordán con todo este pueblo, para ir hacia la tierra que yo daré a los israelitas. Yo les entrego todos los lugares donde ustedes pondrán la planta de sus pies, como se lo prometí a Moisés. El territorio de ustedes se extenderá desde el desierto y desde el Líbano hasta el Gran Río, el río Éufrates, y hasta el Gran Mar, al occidente. Mientras vivas, nadie resistirá delante de ti; yo estaré contigo como estuve con Moisés: no te dejaré ni te abandonaré. Sé valiente y firme: tú vas a poner a este pueblo en posesión del país que yo les daré, porque así lo juré a sus padres. Basta que seas fuerte y valiente, para obrar en todo según la Ley que te dio Moisés, mi servidor. No te apartes de ella ni a la derecha ni a la izquierda, y así tendrás éxito en todas tus empresas.

Que el libro de esta Ley nunca se aparte de ti: medítalo día y noche, para obrar fielmente en todo conforme a lo que está escrito en él. Así harás prosperar tus empresas y tendrás éxito. ¿Acaso no soy yo el que te ordeno que seas fuerte y valiente? No temas ni te acobardes, porque el Señor, tu Dios, estará contigo dondequiera que vayas".
Palabra de Dios.

Salmo responsorial. Salmo 15
A la Palabra de Dios nos unimos diciendo:
R/. Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti.

Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti;
yo digo al Señor: "Tú eres mi bien".
Los dioses y señores de la tierra no me satisfacen.
R/. Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti.

Multiplican las estatuas de dioses extraños;
no derramaré sus libaciones con mis manos,
ni tomaré sus nombres en mis labios.
R/. Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti.

El Señor es el lote de mi heredad y mi copa;
mi suerte está en tu mano:
me ha tocado un lote hermoso, me encanta mi heredad.
R/. Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti.

Bendeciré al Señor, que me aconseja,
hasta de noche me instruye internamente.
Tengo siempre presente al Señor, con él a mi derecha no vacilaré.
R/. Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti.

Evangelio según San Juan. 14,1-12
En aquel tiempo dije Jesús a sus discípulos: "No se turbe vuestro corazón. Creéis en Dios: creed también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas mansiones; si no, os lo habría dicho; porque voy a prepararos un lugar. Y cuando haya ido y os haya preparado un lugar, volveré y os tomaré conmigo, para que donde esté yo estéis también vosotros. Y adonde yo voy sabéis el camino." Le dice Tomás: "Señor, no sabemos a dónde vas, ¿cómo podemos saber el camino?" Le dice Jesús: "Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre sino por mí. Si me conocéis a mí, conoceréis también a mi Padre; desde ahora lo conocéis y lo habéis visto."
Palabra del Señor.

Oración de los fieles.
Presidente: Glorifiquemos a Dios, nuestro Padre, que por Jesús nos ha enseñado las maravillas de su Reino y digámosle:
Te rogamos, óyenos

1.- Por la Santa Iglesia de Cristo: para que el Espíritu Santo le haga sentir cada día con mayor intensidad su responsabilidad en la educación humana y cristiana de las nuevas generaciones. Roguemos al Señor.

2.- Para que la fuerza del bien que brota de esta Eucaristía, transforme el corazón de los maestros en instrumentos de unidad para los niños y jóvenes que buscan desesperadamente a Dios. Roguemos al Señor.

3.- Para que la educación y la cultura no sean instrumentos de separación entre los hombres, sino unos bienes que ayudan a crecer en la fraternidad. Roguemos al Señor.

4.- Para que el hombre, en su búsqueda de la verdad, no se encierre en sí mismo, sino que purificado su corazón con la humildad y la sinceridad, se encuentre con el Dios Amor. Roguemos al Señor.

5.- Por nosotros y por los miembros de nuestras comunidades educativas: para que nuestra fidelidad al Evangelio nos purifique de toda división y nos haga amar a quienes no piensan como nosotros. Roguemos al Señor.

Presidente: Gracias, Padre, por oír nuestras oraciones; manifiesta en ellas tu poder y tu amor y danos tu Espíritu para obrar siempre el bien y glorificar tu nombre. Por Jesucristo nuestro Señor.

Oración sobre las ofrendas.
Al celebrar, Señor, este santo sacrificio, haz que nos ilumine el Espíritu Santo con la luz de la fe de tal manera que nos impulse siempre en la propagación de tu Evangelio mediante la educación de nuestros niños y jóvenes. Por Cristo nuestro Señor.


Oración después de la comunión.
Te pedimos, Señor Dios nuestro, que los sacramentos que hemos recibido nos enciendan en el fuego del amor, de tal manera que impulsen los corazones de los maestros al servicio de tu Evangelio. Por Jesucristo nuestro Señor.

Comentario final.
Hermanos, después de haber celebrado la Eucaristía continuemos nuestra vida dando gloria a Dios y sirviendo a nuestros hermanos con alegría y gozo; no olvidemos agradecer y reconocer el trabajo de los maestros, pues gracias a ellos todos hemos descubierto las grandezas de la creación.

MAYO 15 DIA DEL MAESTRO


Consagración de los Maestros a Jesús Maestro.

Padre Dios, en esta celebración de mi humilde servicio como educador de tus hijos, de mis hermanos, consciente de mis responsabilidades como maestro, Yo N.N. consagro libre y voluntariamente mi vida y mi labor a tu Hijo Jesús, Maestro por excelencia.

Al consagrarte devotamente mi vida en Nombre de Jesucristo, asumo el compromiso de usar los móviles del amor, el diálogo y el interés para superar la debilidad de la coerción y la tentación a ser mercader de conocimientos.

Asumo responsablemente la virtud de la humildad de tal manera que me mantenga tan joven que pueda continuar creciendo mientras enseño, a aprender las leyes de la vida humana tan bien que, redimido de la insensatez, de la recompensa y el castigo, pueda ayudar a cada uno de mis estudiantes, a encontrar una devoción suprema que los impulse a darse por entero y sin interés a sus hermanos, y que esa devoción concuerde con Tus propósitos para el mundo.

Acepto libremente la gracia de luchar, no tanto para ser llamado maestro sino para serlo; no tanto para hablar de ti sino para revelarte en cada uno de mis actos privados y públicos; no tanto para referirme al amor y al servicio humano, sino a poseer el espíritu del amor y el servicio; no tanto para referirme a los ideales de Jesús, sino para revelarlos en cada acto de mi enseñanza.

Al entregarte mi vida en esta consagración, me comprometo a librarme de sumergir mis labores en la mediocridad y para ello tendré siempre presente el pensamiento que, de todas las actividades humanas, la ENSEÑANZA es en gran medida, la tarea que tú has estado haciendo a través de todas generaciones.
Amén.

NUEVO ARZOBISPO DE MEDELLIN


Nos alegramos por la Iglesia Particular de Medellín y por su Pastor el Señor Arzobispo Ricardo Tobón.

Lo acompañamos con nuestra oración.

GRATITUD


La Diócesis de La Dorada Guaduas aprecia y valora el trabajo pastoral del Padre Nelson Jair Cardona Ramírez que desde la Delegación para los Ministros Ordenados de la diócesis acompaña y posibilita el fortalecimiento del Don Sacerdotal.


Dios de larga vida al Padre Nelson Jair.

COMPARTIENDO LA ALEGRIA DE VIVIR UNIDOS



DESCANSA EN PAZ


Nuestra hermana Gloria Isabel Ávila ya descansa de sus trabajos porque sus obras la acompañan en la eternidad.

Quienes compartimos la vida con Gloria Isabel sabemos y damos testimonio de la bondad de su corazón.

El Señor Jesús le conceda la alegría de verle y participar plenamente de su rebaño.

TESTIMONIO DE FRATERNIDAD SACERDOTAL


FRATERNIDAD SACERDOTAL


El ministerio sacerdotal es una experiencia que se comparte con otros, con aquellos que también han sido llamados por el Señor para pastorear su Iglesia. El sacerdote que comparte con otro su vida y su ministerio tiene más fortaleza en la tentación.


Oremos para que al interior de las Diócesis y Comunidades se viva un verdadero espíritu de Fraternidad Sacerdotal.

DIA DE LA MADRE


MAYO 9 DIA DE LA MADRE


Nos alegramos con todas las mamás en su día, ellas son la mejor expresión del amor del corazón de Jesús, porque expresan sencillamente la bondad de su alma y la generosidad de su entrega por los hijos.


Mi regalo sacerdotal es la celebración de la Santa Misa por cada una de Ustedes.


Si quieres que celebre la Eucaristía por Usted o por su mamá envieme un correo diciendome el nombre de la mamá por la que celebraré la Santa Misa.


DIOS SEA BENDITO POR LAS MADRES BUENAS.